miércoles, 18 de noviembre de 2015

INQUIÉTAME

Inquiétame
con la fragancia de tus poros,
déjame
mecer en el movimiento de tu falda,
permite
que mis brazos, desesperados,
se abrasen en la horma 
de tu perturbadora cintura.

Inquiétame, déjame
navegar por los sueños
que nos eran ajenos
y tan propios creamos,
en aquel desconcertado instante.

Naveguemos en besos de mar
hasta la tierra de las metáforas,
para llenar de versos ausente
las palabras rectas,
aquellas que cuelgan 
de árboles resentidos.

Riámonos de las únicas verdades
para evitar su tragedia,
mientras las desmentimos.

             De Ángel Rebollar López ( Cualquier reproducción del contenido, total o parcial,
                                                                               ha de ser, previamente, autorizada por el autor)




domingo, 15 de noviembre de 2015

QUIZÁS TE HALLE

Quizás te halle,
fantasma de los recuerdos,
a la vuelta de la esquina,
o en la convergencia de un instante,
o donde el aíre nos enrede
en remolinos de recuerdos,
posos de nuestras hechuras
marcados por la jodida distancia,

Pero aquí estamos,
si estas aún
en el sendero de la vida,
y ya ves,
a pesar de lo vivido,
montados aún
en unicornios añiles,
cargados de ilusiones.

Todavía construyendo utopías,
tan imposibles,
tan necesarias,
tan vitales.

                   De Ángel Rebollar López (Cualquier reproducción del contenido, total o parcial,
                                                               ha de ser, previamente, autorizado por el autor)

jueves, 12 de noviembre de 2015

LA MENTIRA

La mentira, en su huida,
se encierra en realidades indecibles
y a pesar del hedor que arrastra,
no deja de sorprender,
a aquel que observa,
tanto desparpajo y desfachatez.

Al despertar sospechas
y luchar por erguirse
paseando dulces aromas,
empalagará su tozudez.

Mejor que se esconda,
si descubrirse no quiere,
en una incomprendida broma
que aunque se note,
siempre dejará la duda.

Pobre de la mentira,
defendida con tesón,
mientras se muestra
traicionada por el rostro
que lleva escrito,
en el rictus, la negación,
de sus palabras

                              De Ángel Rebollar López (cualquier reproducción del contenido, total o parcial,
                                                                          ha de ser, previamente, autorizada por el autor)